Estamos cambiando para siempre la recuperación de deudas de consumo.
En InDebted fueron fantásticos ayudándome a solucionar los problemas que tenía de una manera amistosa y empática. Ya está todo arreglado y sin estrés. Uno preferiría no tener que recomendar algo así, por el tipo de compromiso que requiere y la situación económica actual; pero si hay que hacerlo, mejor contar con InDebted. 10/10
Estamos aquí para cambiarle la perspectiva respecto al cobro de deudas
Hace años, cuando nos planteamos externalizar el cobro de deudas para un cliente, a nuestro fundador Josh Foreman se le ocurrió una idea. Después de hablar con diferentes agencias de cobro de deudas para entender cómo trabajaban, llegó a la conclusión de que todo el sector se basaba en una suposición errónea: que las personas endeudadas no quieren pagar.
Es por eso que el cobro de deudas se asoció con estrategias de presión, con poner en evidencia a quienes no pueden hacer frente a los pagos y con una agresividad innecesaria. Muy a menudo, dichas experiencias han provocado que la gente relacione las deudas con un estigma importante y con sentimientos de vergüenza o de deshonra.
Pero lo cierto es que hay cientos de millones de personas en el mundo con alguna deuda. Dada la incertidumbre económica, el aumento de la inflación y el encarecimiento del coste de la vida, es fácil terminar debiendo más dinero del que se tiene. Es más, si la vida nos cambia de la noche a la mañana por razones laborales, familiares o de salud, cualquiera puede retrasarse en un pago o ser incapaz de hacer frente a facturas atrasadas. Hoy mismo nos podría pasar.
Las empresas con clientes en situaciones así tienen cuatro opciones: referirlos a cobradores de deudas; vender la deuda; pedirle a la gente de Contabilidad que vuelvan a llamar al cliente; o intentar frenar las pérdidas y cancelar totalmente la deuda. Todas esas opciones pueden ser negativas para su propia estabilidad económica, para su reputación y para sus relaciones.
Siempre se generan deudas, y eso nadie lo puede cambiar. Sin embargo, sí que podemos cambiar la manera de endeudarnos y ofrecerles a las empresas alternativas para que ayuden a los clientes a ponerse al día.
Y así es como, hace ya unos cuantos años, Josh se planteó: ¿y si la gente sí que quiere saldar sus deudas pero lo que necesita son más opciones y más ayuda? ¿No será, precisamente, en esos momentos en los que nos sentimos más vulnerables cuando se nos deben ofrecer alternativas más humanas, más personalizadas y más empáticas? ¿Por qué no ofrecer a la gente más autonomía y una manera más cómoda de gestionar las deudas, como sucede con cualquier otro producto relacionado con las finanzas personales? Josh se sirvió de su experiencia en programación y de su pasión por crear buenos productos para ir un paso más allá: ¿cómo podríamos emplear la tecnología para hacer realidad todo esto y que, además, sea lo suficientemente adaptable como para ayudar a gente de cualquier parte del mundo?
Lo llamamos «cobro inteligente de deudas». Tiene inteligencia emocional, inteligencia digital y reconoce las necesidades de cada individuo, esté donde esté.
Nuestro producto se basa en tres pilares fundamentales:
Somos ante todo digitales, pero eso no quiere decir que seamos solo digitales. Collect se adapta perfectamente a las preferencias de interacción de cada individuo, ya sea mediante mensajes o con llamadas telefónicas. Si así lo deciden, los clientes pueden autogestionar sus deudas como mejor crean.
Se personaliza el contenido de todos los mensajes que reciben los clientes y se envían por el canal y en el momento que mejor se adapte a ellos. ¿Cómo lo hacemos? Usando la ciencia de datos: así sabemos cómo prefiere alguien saldar su deuda y cuál es la mejor manera de llegar a cada cliente para hacer eso mismo.
Nuestra aplicación permite a clientes autogestionar la manera de abordar sus deudas, con lo cual el nivel de personalización es algo nunca visto. Las opciones de pago o las medidas de ayuda, entre otras cuestiones, son intuitivas y tienen en cuenta la economía de cada individuo. La mayoría de los clientes prefiere gestionar sus deudas a través de la aplicación, pero nuestro equipo de asistencia está siempre a su disposición para ayudarles a través de cualquier canal.
Esto no ha hecho más empezar
- 2016
- desde Australia, Josh construyó la primera generación de Collect, que fue pionera en el uso del correo electrónico y los SMS para el cobro de deudas
- 2017
- nos propusimos la recaudación de un «capital semilla» de 1 millón de dólares y lo conseguimos, lo cual nos motivó a buscar los mercados en los que nuestro producto podría encajar
- 2019
- por primera vez, dimos el salto a un nuevo mercado; se trataba de la vecina Nueva Zelanda
- 2020
- recaudamos 14 millones de dólares para convertirnos en «serie A» y nos expandimos al mercado canadiense, todo ello justo al comienzo de la pandemia mundial
- 2021
- aceleramos nuestra entrada en el mercado estadounidense mediante adquisiciones y pudimos celebrar que ya contábamos con 250 empleados. Además, firmamos contratos con algunos de las empresas más importantes del sector de las tecnofinanzas y cerramos una «serie B» de 25 millones de dólares.
- 2022
- entramos en el mercado del Reino Unido y nos convertimos, según el Australian Financial Review, en el mejor entorno laboral de Australia. Más adelante ese mismo año, recaudamos 22,5 millones de dólares y duplicamos nuestra valoración.